testimonio de una colaboradora.

primero me citaron a una reunión donde me pasaron (me prestaron por 15 minutos, porque decían que no tenían muchos...) un catálogo que decía canon en la portada. no entendí mucho de qué se trataba el asunto, pero me repetían a cada rato que se trataba de algo colaborativo, sin fines de lucro de ningún tipo, un acto de entrega, cosas así. también hablaron de performance por encargo, de gratuidad, de hilda y sus colaboradore/as.
yo, como andaba media aburrida estos últimos días, y como no tenía un duro, acepté. más que nada porque así iba a poder entrar gratis al festival, que aunque era barato, igual era plata que no tenía.
me dijeron que la weá era un monopolio donde el g8 iba a perder todas sus posibilidades de terminar de privatizar a un país tercemundista, que me tinca que es chile. yo dije sí a todo. me dijeron que fuera de negro y que llegara a las 19:00 en punto.
yo no sé quién será esa hilda yáñez, pero igual me gustó trabajar para ella. en un momento le pregunté a reino unido si acaso ella también creía que era la que representaba al estado. cosa bastante probable, puesto que dominaba las instrucciones y el sentido mismo de cada situación perfectamente. reino unido me dijo que seguro y después se retractó. trató de convencerme que yo misma era la hilda yáñez. quizás tiene plata esa hilda, a pesar del nombre de rota, quizás tiene harta plata y sólo se aprovechó de nosotros, jóvenes, pobres y súper ociosos, pero no me importa. igual hice el ridículo con clase.
bueno, ni tan ridícula. yo jugué representando a francia el segundo día. perdí muy pronto, pero lo importante era jugar, porque que íbamos a perder ya estaba claro desde un principio.
sé que lo más seguro es que no pueda ser un aporte para prácticamente ningún artista. no soy creativa y el dibujo me va muy mal. sin embargo es por esto mismo que valoro la confianza que hilda yáñez depositó en mí. creo que ella es una artista sensata a la cual no le importa ni la calidad ni la clase social de su colaboradore/as, sino sólamente que tengan disponibilidad para colaborar, gratis y desinteresadamente. a mí me gustó eso, más bien me gustó que alguien me viera capaz de hacer una obra de arte, en un espacio especial para el arte.
el resto de los participantes también eran muy simpáticos y simpáticas. nos bajamos entre todos, 5 botellas de vino tinto y 6 de cerveza durante la partida. quedamos bien curados.
la acción era bien fome. primero partíamos desde la esquina de la calle caminando al centro de cultura contemporánea en fila india. alguna gente nos miraba, pero la mayoría nos ignoraba. llegábamos adentro y nos sentábamos a jugar. habían hartas cámaras y flashes y a italia le dije que seguramente yo perdía tan rápido por eso, por falta de costumbre... italia se rió y me dijo que yo era mala para este juego, que no tenía alma capitalista y que era sencillo.
bueno, en resumen, lo pasé muy bien, y quiero decir mediante esta pequeña carta que cuando hilda yáñez quiera me tenga en cuenta para ayudarle en cualquyier cosa que necesite.
un abrazo
gladis

mi última acción

he comenzado a convencerme cada día más en que ya no debería usar mayúsculas para escribir. las mayúsculas se utilizan para designar los comienzos de una frase tras un punto y para los sustantivos propios. últimamente he de desconfiar de la propiedad. tampoco vislumbro el principio de algo, con la exactitud con que una mayúscula lo hace. los nombres propios son, una de las cosas menos propias que
tenemos, si es que algo propio podemos tener. he dudado en ciertas dosis de la propiedad, he llegado a relativizarla, ponerla en escena como actriz principal de los últimos arrebatos y ella ahí, disminuida en el escenario piñufla de dos cajas de leche, diciéndome "chao". la propiedad no debe existir porque es una farsa, y por ende los "nombres propios" tampoco.
yo me llamo hilda yañez yañez, con minúsculas, porque no soy propia, ni tengo propiedad alguna, y mi importancia no va por tamaño de letra.
hoy quiero inaugurar un estado nuevo: un punto es un punto siempre, es un corte, pongámosle mayúscula después o no.
es igual que la coma, que representa pausa. por eso las siglas también pueden ir con minúsculas, ya que es el punto el que en este caso designa abreviación. espero que este arrebato de anarquismo sea un poco de inspiración, emoción.
la lucha de clases de las letras es un problema que deberíamos ir solucionando desde ahora.